La Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010 se celebró por primera vez en África y por quinta ocasión en el hemisferio sur, pues venció en la elección previa a Egipto y Marruecos.
A este Mundial regresaron varias selecciones tras muchos años de ausencia: Corea del Norte, que no participaba desde 1966, Honduras y Nueva Zelanda desde 1982, Argelia desde 1986, y Grecia desde 1994. A estos equipos se les unieron Eslovaquia y Serbia, aunque selecciones de estas dos últimas naciones habían participado en anteriores citas mundialistas, pero representando a países hoy desintegrados; Checoslovaquia en caso de la primera, y Yugoslavia y posteriormente Serbia y Montenegro en caso de la segunda.
Tras la consagración de España, este Mundial fue el primero jugado fuera de Europa en el que se proclamó campeón un equipo de dicho continente, además de que fue la primera vez desde 1998 en que ganó un equipo sin copas mundiales anteriores en su palmarés, así como la primera vez desde 1978 en que dos equipos sin copas mundiales se enfrentaron en la final. Por su parte, fue la primera vez desde 1962 en que Europa y Sudamérica no se alternan el campeón mundial, ya que en la edición anterior el campeón también fue europeo (Italia).
España, encuadrada en el grupo H en la fase de grupos, quedó primera por delante de Chile, Suiza y Honduras. En octavos y cuartos de final, eliminó a Portugal y Paraguay respectivamente, enfrentándose a Alemania en semifinales derrotándola con un gran juego, y accediendo a la final del Mundial. El 11 de julio de 2010 y en el estadio Soccer City de Johannesburgo, España se proclamó campeona del mundo al ganar a Holanda 1-0, con gol de Iniesta en el minuto 11 de la segunda parte de la prórroga.
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